Cementerio Norte

El cementerio público Norte es el mayor cementerio de Varsovia y unos de los más grandes de Europa (abarca superficie de 143 hectáreas). La ubicación del cementerio se estableció en la década de 1960 en las afueras del norte de la ciudad y, en parte, en la zona de la localidad de Wólka Węglowa (por eso el cementerio se conoce comúnmente como ”Cementerio de Wólka”).

Decálogo, diez
La escena del funeral filmada en el cementerio más grande de Varsovia (y, seguramente, uno de los mayores de Europa) es en realidad el inicio de la historia de un cuento sobre una herencia y sus herederos.

Una de las inspiraciones, relacionada con la génesis de los guiones del Decálogo, es un cuadro del siglo XV pintado sobre una tabla, La Tabla de los Diez Mandamientos. Krzysztof Piesiewicz, el coguionista de la película, lo vio cuando era joven en el Museo Nacional de Varsovia y años después se lo contó a Kieślowski.

La imagen que ilustra el último mandamiento del Decálogo representa un cortejo fúnebre en oración. Al lado se ve la casa y la finca del difunto. Dos hombres de la familia están especialmente interesados en los bienes que ha dejado el fallecido. Un diablo invita a pasar la valla sujetando un letrero con una promesa tentadora: quien llegue primero podrá apropiarse de la mejor vaca. En la película los hijos del padre enterrado son interpretados por Jerzy Stuhr y Zbigniew Zamachowski. Volverán a hacer de hermanos que se encuentran en un funeral en Blanco, de Krzysztof Kieślowski. En ambas películas la escena del entierro está vinculada al tema de la avaricia humana, sobre la que tratan las dos obras. El  ataúd que es bajado a la fosa en el Decálogo, diez esconde el cuerpo de Czesław Janicki. El personaje (interpretado por Bronisław Pawlik) aparece en la serie solo una vez cuando en un callejón del barrio se encuentra con Zofia (profesora de ética) en el octavo episodio del ciclo.

Mikołaj Jazdon


 
X mandamiento:
[No codiciarás…] la casa [de tu prójimo] (…), ni nada que sea de tu prójimo.
 

”(Des)obediencia aplazada”

El mandamiento ”no desearás ninguna cosa que sea de tu prójimo”, efectivamente se diferencia de ”no robarás”. En la película el robo lo cometen un grupo de filatelistas.  Estos ladrones son los que violan el mandamiento X, aunque no se trata del derecho de propiedad, sino de su irrupción y del daño hecho en relación a la pasión de vida de los protagonistas, los hermanos Jurek y Artur, y sobre todo, a la de su padre fallecido, gran coleccionista de sellos.

Como dice en la película un conocido del Padre: ésta ha sido toda su vida y sería un crimen desperdiciarlo. Se trata entonces de una pasión, no de un vicio (el vicio se asocia más con una pérdida sin sentido y con el fiasco). Ante la sorpresa de los hijos, el padre descuidaba no solo a ellos, sino también a sí mismo y todo lo demás, sacrificando todo por una valiosa joya: su colección.

Ahora entra al escenario el mandamiento VI, en parte, por el lado opuesto: los hijos renunciaron a la honra del Padre cuando él dejó de honrarles a ellos, se volvió ajeno y ausente en su vida. Ahora los hermanos expresan un verdadero respeto hacia su padre, retomando después de su muerte no tanto su colección, sino su pasión por los sellos, como si fuera un testamento no escrito. Sin darse cuenta, de este modo, expresan su respeto y obediencia aplazados en el tiempo. Y los hijos sufren también las consecuencias de una pasión: ahora son ellos quienes descuidan a sus familias (Jurek) y su arte (Artur). Artur, un cantante popular, grita la letra de una canción que cierra, a modo de un broche, el principio y el final de la película: una canción sobre el deseo, ¡en contra de todos los Diez Mandamientos!

En este episodio Kieślowski no les manda el Ángel a los protagonistas. Ya en el Decálogo, nueve el Ángel estaba algo perdido. Desde luego el deseo no es cosa de Ángeles, sino de personas,  y aunque te puede hacer caer (también a un Ángel, como en el Génesis), sin él no podríamos llegar al arte.  

Michał Klinger
Dekalog X

Dekalog, dziesięć

Dekalog, dziesięć